lunes, 15 de octubre de 2007

HELLOWEEN "KEEPER OF THE SEVEN KEYS I & II" (1987 y 1988)



Volviendo la mirada 15 años atrás en el tiempo, recuerdo que Helloween se había dado a conocer en nuestro país con el “Walls of Jericho”, un album que incluso tocaron en forma íntegra en el espacio “Música a otro Nivel” en la radio Tiempo.

Sin duda, el impacto de “Walls” fue grande y todos los que estábamos en el metal en esa época, tuvimos la oportunidad de descubrir una banda nueva de Alemania, desde donde antes sólo conocíamos a Scorpions y Accept (y a unos primigenios Kreator, Sodom y Destruction).

Quizás debido a su estilo acelerado y speed, Helloween fue etiquetado lisa y llanamente como Thrash Metal, ya que la denominación “Power Metal” o “Melodic Power Metal” ni siquiera se acuñaba todavía.

En esos tiempos pretéritos, las noticias escaseaban, no existía internet, ni siquiera revistas especializadas en nuestro país, sólo los fanzines con calidad de fotocopia, por lo tanto, era muy difícil saber los movimientos de las bandas. Por lo general uno se encontraba con las novedades cuando iba a una tienda de discos y descubría con excitación que había llegado el nuevo album de alguna banda. Por ello, muchos se sorprendieron al ver que en el “Keeper 1” debutaba un nuevo cantante: Michael Kiske. Si bien es cierto Kai Hansen no cantaba mal y poseía una voz alta y aguda, era un “guitarrista que cantaba”, por lo que la incorporación de Kiske se constituyó en un real aporte y en un acierto destacado. Su voz pletórica, su amplio registro, su caudal generoso, de inmediato hicieron que Kiske se ganara el cariño y respeto de todos los fans, no sólo de Helloween, sino del metal. Claro, no todos los días aparecía un cantante que se pudiera parar de igual a igual al lado de un Dickinson por ejemplo. Además no cantaba con ese extraño acento alemán que por esos días tenían Klaus Meine de Scorpions y Udo Dirksneider de Accept.

El ritmo marcial de la intro “Initiation”, fluídamente daba paso a la potencia acelerada de “I´m Alive


un tema de esos para cantar con el puño apretado y desatar el headbanging. Sin duda, un clásico instantáneo que deslumbraba además, por sus punteos de guitarras “gemelas” de exquisita técnica de la dupla Michael Weikath/Kai Hansen, siempre apoyado por el bajo poderoso y rimbombante de Markus Grosskopf y la batería inagotable y llena de talento de Ingo Schwichtenberg, un bateria pletórico, que lamentablemente hace unos años, sumido en una profunda depresión, acabó trágicamente con su vida suicidándose.

La cosa no podía continuar de mejor forma que con la maravillosa “A Little Time” un tema de autoría de Kiske, donde el novato cantante demostraba todo su talento como compositor.

Ya con la llegada de “Twilight of the God


de ritmos cambiantes y con la voz subiendo y bajando, quedaba claro con sólo escuchar 3 temas, que Helloween había logrado superar el listón que había quedado con “Walls” y era una banda mejor en todos los sentidos. Sin duda en esto tuvo mucho que ver la incorporación de Kiske, que le dio una nueva dimensión al sonido del grupo con su extraordinaria voz; pero Weikath y Hansen mejoraron como compositores (como lo demuestran la riqueza de los arreglos de la poderosa balada “A Tale That Wasn´t Right” por ejemplo), y toda la banda mejoró como ejecutantes, como queda de manifiesto en el himno “Future World


quizás un tema más accesible, más “radial” pero impecablemente matizado y arreglado con sutilizas técnicas como la utilización de un Emulator.

Si a esta altura el album ya podía vaticinarse como un clásico seguro dentro de la discografía del grupo, aún faltaba esa obra magnánima de 13 minutos de duración que lleva por título “Halloween”,


un temazo por donde se le mire, con una base demoledora, la voz de Kiske a tope de facultades y unas guitarras avasallantes que te dejan sin aire de sólo imaginar como simples mortales podían germinar con febril brillantez solos tan técnicos pero llenos de feeling a la vez. Sin duda, la guinda de la torta y que dejaba en evidencia además la prolija y cuidada producción de Tommy Newton y Tommy Hansen tras las perillas, dos desconocidos, que unos años más tarde se convertirían en verdaderos “gurús” del estilo y muchas bandas pasarían bajo su tutela buscando ese “sonido” a lo Helloween. ¿Qué más se puede decir de album impecable, que rezuma potencia y calidad en todos sus surcos demostrándonos a una banda que se acercaba paulatinamente al peak de su capacidad y de su talento?

Tal vez la única crítica negativa que se podría hacer a este album que con justicia se ganó un sitial de honor entre los discos clásicos del metal, sea su corta duración: sólo 37 minutos de música.

Y no hay que olvidar que todos sabíamos que venía un “Keeper” Parte 2, pero muy pocos, a la luz de los impecables pergaminos expuestos en esta primera parte, confiaban en que la banda sería capaz de superar el nivel de esta placa. Pero los milagros ocurren y fue ahí cuando por primera vez escuché la frase “ a veces, segundas partes son incluso mejores”.


Es cierto. El “Keeper 1” es mucho más trascendente que esta segunda parte, porque mostró una fórmula nunca vista hasta el momento y es esa placa la que genera más influencia en el mundo del heavy metal. Pero muchas veces caemos en la tentación de echar a competir un par de discos de alguna banda y creemos que el “triunfo” de uno desmerece al otro. En varias ocasiones he escuchado la frase “sí, el Keeper 2 es bueno, pero no tanto como el 1”. Personalmente no estoy de acuerdo.

Tal vez porque por un asunto generacional escuché ambos discos al mismo tiempo, pero este segundo Keeper tiene una de las mejores colecciones de canciones que es escuchado en mi vida. No vamos a entrar a analizar si ésta es la mejor formación de la historia de Helloween, o si Kiske y Hansen eran efectivamente lo que nos cautivaba del Helloween ochentero y la de ahora es una banda totalmente distinta. Concentrémonos en la música.

“Estructuralmente”, este “Keeper 2” es similar al primero. ‘Invitation’, típica introducción épica, da paso a ‘Eagle fly free’,


un clásico inoxidable, una muestra de que velocidad e intensidad sólo se hacen una cuando los interpretes son unos monstruos. Kiske te vuela la cabeza con su asombrosa voz, la dupla Hansen-Weikath son un verdadero delirio para tus oídos... y ni hablar de Grosskopf y Schwichtenberg, absolutamente inhumanos. Ufff, que temazo!! De puro escucharlo terminas transpirando, con la adrenalina al máximo. Hasta el día de hoy Helloween ha intentado emular aquella fórmula velocidad-virtuosismo-intensidad, con pocos resultados al nivel de esta joyita. El Helloween de la era Deris tiene un sonido mucho más grueso y aplastante que intenso.

El éxito de su primera parte le permitió al grupo experimentar y jugar más en el estudio, lo que lamentablemente no significó pasarla mejor (Hansen abandonaría la banda pocos meses después). Por eso, no es raro encontrarnos con temas tan variados como ‘You always walk alone’, que bien podría aparecer en el “Powerslave” de Maiden, y tal vez por eso no es una canción con la que uno se identifique o que prefiera de este disco. Nos encontramos también con la locura de ‘Rise and Fall’, con evidentes saludos (¿o parodias?) a Queen, una melodía juguetona y alegre. Marca distancia de cualquier otra banda de heavy metal, demostrando que éste también puede ser un estilo imaginativo, entretenido y que se ríe incluso de si mismo. Compuesta por Weikath, a ratos parece un juego, una joda. Pero está perfectamente insertada entre 2 temas que no son el Helloween típico: la mencionada ‘You always walk alone’ y ‘Dr. Stein’.

En ‘Dr. Stein’,


Weikath nos ratifica que su joda es “en serio”. Otro tema “distinto”, es cierto. Pero qué bien hecho que está. El teclado es de antología. El coro masivo convoca a involucrarse con la canción, lo que no cuesta mucho teniendo ésta una melodía tan pegajosa. Otra vez vemos a Helloween marcando distancia de sus pares. Pero mucho más que eso, se muestran como una banda atrevida, con personalidad.

La paz aparece repentinamente con ‘We got the right’, la joyita de este “Keeper 2”. La voz de Kiske aquí se va, disculpen la expresión, a la mierda. Es decir, empieza haciendo juego con el bajo de Grosskopf, y poco a poco comienza a tomar vuelo, lo mismo que la canción. Pero de golpe uno siente como sube, sube, sube y sigue subiendo. La primera vez que escuchas este tema piensas “¡¡¡cuándo se detiene este tipo!!!”. Es impresionante, nunca en mi vida escuché una garganta como la de Kiske. Tal vez no sea el mejor vocalista de la historia ni nada por el estilo, pero esta canción la puede cantar él y nadie más que él. De todas formas, no sólo es su vozarrón el que te deja de espaldas, es toda la banda que toca con todo. ¡Qué temazo! Un coro épico, una melodía que vuela por sí sola. Te llega a dar escalofríos. Es una muestra de cuánto creció el heavy metal en esos años dorados. Pónganle atención a la letra por favor, bien clarito el mensaje, solamente que uno no le pone mucha atención ante tamaña interpretación. Personalmente, siempre he creído que en 1988 tuvimos en ‘We got the Right’ y ‘The Prophecy’ (de Iron Maiden) a 2 de las canciones más subvaloradas de la historia.

Cuando termina ‘We got the Right’, uno queda con la sensación de que termina el disco. Fue demasiada intensidad, demasiada pasión, demasiado dramatismo. Por suerte, el disco no finalizó. Kai Hansen, que no se había pronunciado aún en esta placa, se despacha una tripleta de temazos. El primero de ellos es ‘Save us’, pura velocidad, pura adrenalina. Una de las canciones con sonido más agresivo de la colección de Keepers. Se nota la mano de Kai, porque aquí no hay metal progresivo ni experimentos. La banda se siente fuera de control, pidiendo a gritos “por favor, sálvennos”. Otro temón, Helloween arrasando con todo.

March of Time’ nos devuelve al Helloween que evoluciona, que crece. Tras haber escuchado el “Keeper 1” y la primera parte de esta segunda entrega, ya sentimos en temas como éste un estilo propio, reconocible, y bien consolidado. Suena tan bien, tan perfecto, que hace que uno casi pierda la capacidad de asombro. Y debe ser uno de los mejores coros de toda la discografía de los germanos. Hasta ahí llegamos a lo que podemos calificar como “temas de heavy metal”. Porque cuando nos topamos con ‘I want out’,


y logramos sacarnos de la mente a qué disco y qué banda pertenece, la sentimos como un tema de rock & roll del más clásico. Con la salvedad de que está tocada como si a cada miembro del grupo se le quemaran las manos con sus instrumentos y que el vocalista canta como si se fuera a acabar el mundo. Ingo marca el inicio del tema, como diciendo “agarrense que alla vamos”. El resto es un goce absoluto. Espectacular.

‘Keeper of the Seven Keys’ cierra este fenomenal disco de la mejor forma posible. Como habíamos dicho en un inicio, se repite la fórmula del tema épico de 13 minutos de cierre. Tal vez por la inevitable comparación, uno pierde la objetividad para calificar esta canción. Personalmente, me gusta más ‘Halloween’, pero eso no quita que ‘Keeper of the seven keys’ sea una pieza de colección. El broche de oro para casi una hora sensacional.

La tentación de comparar la tenemos todos, pero este “Keeper of the Seven Keys Part II” se ganó su lugar en la historia por sí solo. No es “la segunda parte”. Es “otra” obra maestra de una de las bandas más importantes del género. Y es el mejor testimonio de ese Helloween que se paraba de igual a igual con Judas, con Maiden o con el que le pusieran al lado. Hoy, ese Helloween es sólo un recuerdo. Cambiaron su sonido, su estilo, y ni hablar de los interminables cambios de integrantes. Esta versión, con Andy Deris a la cabeza, también ha tenido momentos notables. Pero ya llegará el momento de recordarlos. Pero no será ahora. Será, eso sí, más temprano que tarde.

Extraido de : http://www.rockaxis.com/

2 comentarios:

Pablo dijo...

VAYA DOS DISCOS!!! marcaron un estilo, hasta ese año 87 sin "etiqueta", el POWER METAL, y todo gracias a HELLOWEEN!!

Me era muy dificil elegir uno, tal vez por ser el primero, deberia haber puesto la primera parte, pero es que la segunda parte (para mucha gente) es mejor que la primera, y para que no haya malos rollos, he puesto los dos.

Dificil de quedarse con alguna cancion, de su primera parte me quedo con tres "I`m Alive" increible michael kiske con esa voz que no tiene nada que envidiar a los mas grandes y "Future World" con esa introduccion que tanto me gusta y por supuesto "Halloween" tema epico donde los haya, de larga duracion pero que te deja alucinado. Y de la segunda parte me quedo con "Eagle Fly Free" otra vez con kiske dejando su sello personal, "Dr. Stein" la cancion con que descubri a helloween, que recuerdos jejejeje y "I Want Out" posiblemente la cancion mas recordada por el video, y ese gran solo de guitarra de kai hansen!!

Ahora os dejo a vosotros, a ver que opinion teneis de estos dos discos!!

P.D. 1 - Este mensaje es para jamfry y para echoriath!!! a ver si me poneis otra cancion en el coche que no sea "I Want Out"!!! jajajajaja como veis hay mas canciones.....

P.D. 2 - Hacia tiempo que no ponia la direccion para bajarse los discos, aqui os dejo las direcciones, son las ediciones extendidas del año 2006 remasterizadas:

aqui la primera parte http://www.mininova.org/tor/577114

y aqui la segunda http://www.mininova.org/tor/806589

A PASARLO BIEN!! UN SALUDO!!

Anónimo dijo...

tio mola, mola tio.....
joder como te pasas tronco sabes que no tengo cultura musical y por eso solo pongo I WANT OUT (ironia, ironia, ironiaaaaaaaa.........)
que te voy a decir que no sepas ya, me encantan HELLOWEEN, y consegui la discografia de manos de un jamfry jejeje que me la dio por que no le gustaba y ahora el muy cabron pierde el culo cada vez que lo oye jojojojojo estas son las casualidades de la vida un salidin troncos and .....................
LONG LIVE TO ROCK´N ROLL!!!!!!!!!!